Del conflicto intrafamiliar a la delincuencia juvenil

Landeira Palau, Pol
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El ser humano debe organizar la convivencia con los demás, a fin de que se dé un ambiente de respeto, paz y armonía. Éste es el punto de partida del trabajo, y es el hecho de que los humanos se relacionan los unos con los otros, debido a que su naturaleza les predetermina para actuar de este modo. De dicha relación, puede nacer un conflicto, ya que se pueden presentar diversas formas de afrontar una situación, tener diferentes puntos de vista, u opiniones. Por tanto, debido a la relación que se establece entre los seres humanos, nacen los conflictos. Me centraré en los conflictos familiares, y en las repercusiones que puedan tener en terceras personas. Por tanto, la hipótesis que planteo es la que sigue: ¿Aplicando la mediación para resolver los conflictos que se llevan a cabo en el seno familiar, se pueden reducir las posibilidades de que los hijos tiendan a cometer los mismos comportamientos que sus modelos de referencia? Aquí, principalmente trataremos aquellos casos donde se actúa con violencia, ya que reaccionar de dicha manera tiene repercusiones a terceras personas. La técnica que aquí se expondrá es la mediación, que consiste en que unas partes lleguen a un acuerdo gracias a una tercera persona imparcial, neutra que las ayudará en el proceso ​
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