Agosto de 1936: terror y propaganda. Los orígenes de la Causa General

Abstract

La batalla de la propaganda se inició al mismo tiempo que el golpe militar del 18 de julio desgarraba el país. A pesar del estricto control de la información que los sublevados ejercieron desde un principio, la presencia de corresponsales extranjeros provocó que en aquellos momentos iniciales pasasen al exterior imágenes y crónicas que dañaban seriamente la imagen que aquellos querían dar. Así ocurrió en Badajoz en agosto del 36. En consecuencia, el servicio de propaganda de los golpistas comenzó de inmediato una campaña mostrando los crímenes marxistas que dio sus primeros frutos en ese mismo año con los llamados Avances del Informe Oficial, informes que, gestados en Sevilla, constituyen realmente los orígenes de la Causa General, el gran proceso contra los vencidos decretado por Franco en abril de 1940. Dichos Avances sólo encontraron un problema: la insuficiente sangre derramada por los rojos en el suroeste español.

The propaganda battle began at the same time as the military coup of 18 July was tearing the country apart. In spite of the strict control of information deployed by the insurgents from the very beginning, the presence of foreign correspondents in that early period led to an outflow of pictures and reports that seriously damaged the image that those involved in the coup sought to project abroad. This is precisely what transpired in Badajoz in August 1936. Thus, the Nationalist propaganda machine launched an immediate campaign revealing Marxist atrocities, which bore fruit that same year with the so-called Avances del Informe Oficial, reports prepared in Seville which gave rise to the Causa General, the great legal process against the vanquished, decreed by Franco in April 1940. These advance reports encountered one major problem: the lack of bloodshed perpetrated by the Republican side in the southwest of Spain.